Déjala que baile (Melendi ft. Alejandro Sanz y Arkano) – 2018

Sí, lo sabemos. Esta no es la canción más famosa de Melendi. Ni siquiera la más recordada, pero en este artículo hablamos de canciones del verano, y en el de 2018 esta sonaba en todas partes. Melendi, en su versión ya más «pija», se junta aquí con Alejandro Sanz y Arkano de su álbum Ahora. Una canción reivindicativa que realza y reivindica los derechos de la mujer.

Na Caleya (La Bandina) – 2006

Mientras en el verano de 2006, en España estaban pendientes del «corrá» del Koala, en Asturies teníamos cuidado de no mexar en porricu na caleya. Este simpático videoclip que celebraba los diez años del grupo La Bandina y acabó tarareándola toda Asturies por la calle, gracias también a la difusión que le dio la por entonces recién estrenada TPA. La canción se hizo tan famosa que hasta Will Smith llegó a bailarla… o eso es lo que sale en Youtube.

Busindre Reel (Hevia) – 1998

Puede que la música celta sea lo último que se te viene a la cabeza a la hora de recopilar canciones del verano, pero esta pegó, y pegó fuerte. Hevia había sacado su segundo disco, Tierra de nadie, y su single «Busindre Reel» llegó a sonar en todo el estado español. Tanto fue el éxito de esta canción gracias a un anuncio de televisión (como suele pasar a menudo con las canciones del verano), que Tierra de nadie llegó a 6x platinos en España, convirtiéndose en el asturiano que más discos ha vendido en la historia. Un título que, dado cómo han cambiado los tiempos, probablemente nadie vaya a quitarle nunca.

El tractor amarillo (Zapato veloz) – 1992

Pocas dudas caben de que esta es la canción del verano que salió de Asturies por antonomasia. Corría el año 1992 y todo el mundo, grandes y pequeños, sabían que lo que se llevaba por aquel entonces era tener un tractor amarillo. El grupo de Trubia Zapato Veloz, compuesto Javier Díaz Gotín, José Carlos Álvarez Fernández y Mario Mosteiro Fernández se encontró, de repente, con un «hit» (como dicen los modernos) que transpasó las fronteras hasta llegar a América latina e incluso a Hong Kong. Los derechos de la canción les siguen generando ganancias todavía a día de hoy. El éxito llegó a tal punto, que en febrero de 2020 el grupo, reformado, sacó un remix con estilo… ¿más moderno? Nosotros nos quedamos con que conseguimos «colar» nuestra lengua en todo el mundo, aunque sólo fuera un «ye», que por algo se empieza.