Con el augue de las plataformas online, y sobretodo tras la pasada cuarentena que nos mantuvo casi tres meses encerrados en casa, la sociedad consume cada vez más productos audiovisuales, sean estos en forma de película o de serie. Hoy os proponemos, como alternativa, cuatro productos audiovisuales (dos películas y dos series) que usan como lengua vehicular nuestra lengua: el asturiano.

7337 – Segio G. Sánchez (2000)

En otoño de 1973 una maestra llega a una escuela rural abandonada desde la guerra civil. Durante su estancia inquietante se encuentra con un misterioso niño de procedencia desconocida. Además, por las noches escucha ruidos y ve cosas extrañas. Quizás os suena el argumento, y es que este cortometraje fue la primera semilla para rodar años más tarde El Orfanato. Sergio G. Sánchez, su director y guionista, dirigió este cortomatraje que ganó varios premios y certámenes nacionales. Sergio G. Sánchez empezó con este proyecto a especializarse en esos thriller psicológicos que tantas pesadillas nos hizo «disfrutar» en las butacas de los cines años después con éxitos como el propio El Orfanato, Lo Imposible, El secreto de Marrowbone, o, muy pronto, Alma en Netflix, que también se rodó en Asturies.

Bernabé – Pablo Casanueva (2013)

Bernabé fue el primer largometraje de la historia rodado en asturiano. Cuenta la historia de Bernabé Ruenes Santoveña, que condenado a 30 años de cárcel por haber protagonizado un conflicto con un cabo del Ejército, escapó al monte y ganó fama y notoriedad en todo el Oriente de Asturias. Aunque no era un refugiado político, acabó viviendo como tal por culpa de ese conflicto. Casanueva dio con esta idea mientra grababa el documental Xente. Fue recogiendo los testomonios que más le gustaban y lo acabó convirtiendo en guion. Y es que, aunque se trata de una película de ficción, todo está basado en testimonios de personas que conocieron u oyeron hablar de Barnabé. La realización de la película contó con la colaboración de asociaciones y particulares que cedían vestuarios y localizaciones. La película se realizó en asturiano porque fue «la lengua en la que me contaron la historia de Bernabé, además de la lengua en la que hablo», dijo el propio Casanueva.

Chatarrona – Alberto Suárez (2011)

En pleno auge de las webseries en Internet, Publicaciones Ámbitu realizó la suya propia como una propuesta para encaminar una ficción en TPA: Chatarrona. La sitcom online fue la primera en introducir personajes que se expresaban en asturiano, aunque por el propio argumento, varios diálogos ocurrían en castellano: Chuso (Alberto Rodríguez) y Esteban (Pedro Durán) son dos compañeros de piso en paro y con problemas económicos. Un buen día, Chuso decide solucionar sus problemas económicos poniendo un anuncio para acoger inquilinos que quieran compartir piso y, de paso, aprender asturiano («Namás tenemos esta casa y la llingua, asina que vamos saca-y partíu a la casa y a la llingua«, dice Chuso). Al anuncio responden Malik (Masokhna Diop), un inmigrante senegalés que trabaja de camarero en una sidrería y Carolina (Juana Marrón), una joven que vivió en varias partes del mundo y siente ahora predilección por «lo autóctono». La serie trata de realizar un relato social e irónico de una Asturies dañada por la época de la crisis del 2009 y, sobretodo, una visión positiva del proceso de recuperación lingüística. Lamentablemente, sólo tuvo tres capítulos.

Proyectu Webserie – Marcos S. L. (2019)

Tras forjarse una experiencia en producción de contenido online, el canal de entretenimiento en asturiano Playpresta decidió embarcarse en la creación de la primera webserie realizada íntegramente en asturiano. Esta fue Proyectu Webserie, una sitcom que parodia el mundo de Internet, sus contenidos y su forma de crear esos contenidos desde dentro, con varios guiños a virales, memes y todo tipo de contenido que nos encontramos en la red de forma satírica. El argumento cuenta la historia de cómo Xurde (Pablo Mare) y Adriana (Olaya Pena) intentan encontrar contenido nuevo para su canal. Xurde, cuenta cómo se encontró por casualidad con Ayalga (Bea Canteli), un antiguo amor de instituto que sueña con ser actriz. Para no perder el contacto con ella, éste decide ofrecerle participar en una webserie de la que no hay ni guion, ni argumento, ni nada preparado. A partir de ahí, tendrán que intentar sacar una webserie junto con Oliver (Pepiox08), un youtuber algo corto de entendederas, y vivir con todos los obstáculos que se encuentran para crear contenido online. Todo lleno de humor absurdo, ironía y muchas risas de mano del guionista Marcos S. L.