En el corazón de estas jornadas gastronómicas está el pote de Turón, un plato tradicional que ha sido transmitido de generación en generación. El pote es una suculenta mezcla de legumbres, embutidos locales, carnes variadas y vegetales frescos, cocidos a fuego lento en una olla de barro. La receta se perfeccionó a lo largo de los años, incorporando sabores locales y técnicas culinarias que resaltan la calidad de los ingredientes.

La XXXII edición de las Jornadas del Pote de Turón, se celebrarán del 1 al 10 de diciembre en el valle turonés. Participarán el Bar Gutiérrez, Casa Ita, Casa Migio, Casa Nando, Coimbra, El Descanso, El Mesón de Carlos, El Parador, La Caleyuca, La Gotera de Jorge y Vatur.

En el transcurso de las jornadas gastronómicas, los visitantes tienen la oportunidad única de realizar un recorrido por los distintos restaurantes y puestos callejeros que participan en el evento. Cada establecimiento ofrece su interpretación única del pote de Turón, mostrando la diversidad y creatividad de los chefs locales.

Los cocineros locales desempeñan un papel crucial en la preservación y evolución de la tradición culinaria de Turón. Durante las jornadas gastronómicas, estos apasionados chefs comparten sus conocimientos y habilidades a través de demostraciones culinarias y talleres. Los visitantes tienen la oportunidad de aprender los secretos detrás del pote de Turón y descubrir cómo se seleccionan y combinan los ingredientes para crear esta deliciosa especialidad local.

Con un enfoque en la sostenibilidad, las jornadas gastronómicas también destacan la importancia de utilizar ingredientes locales y apoyar a los productores de la zona. Este compromiso con la sostenibilidad no solo resalta la calidad de los productos, sino que también contribuye al desarrollo económico de la comunidad local.

Las Jornadas Gastronómicas del Pote de Turón no solo son una celebración de la buena comida. También son un homenaje a la rica tradición culinaria de la cuenca minera. Turón se ha convertido en un destino culinario imperdible, donde los sabores auténticos y la hospitalidad local se fusionan para crear recuerdos duraderos.