Si hay una zona que sin duda estos días nos gusta visitar es la playa. Es la época perfecta para disfrutar (cuando el tiempo nos lo permite) de tomar el sol tumbados en la arena, un relajante baño, o jugar saltando las refrescantes olas con nuestros amigos, justo antes de tomarnos un helado. Y si hay una playa que muchos asturianos y turistas de fuera del país y varias partes del mundo visitan esa es la de Rodiles.

Y es que esta playa del concejo de Villaviciosa es, sin duda, una de las más populares de toda Asturies. La playa se extiende a lo largo de un kilómetro de longitud y 300 metros de ancho al oriente de la desembocadura de la Ría de Villaviciosa. En su extremo occidental se comunica con la Playa de Misiegu, una playa más pequeña y con aguas más tranquilas que las de Rodiles.

Esta playa de arena fina y tostada resulta un enclave privilegiado para todo tipo de deportes marítimos: sobretodo para la pesca y para el surf. De hecho, en el mundo del surf Rodiles es muy conocido por la zona conocida como «la barra», en la que se produce una ola considerada entre las cuatro mejores olas de Europa.

Además Rodiles cuenta con unas vistas que dejan boquiabierto a todo el que lo visita: una mezcla relajante y maravillosa de paisaje de playa y montaña, junto con un mirador de pájaros, el sonido del mar, y las vistas de la también preciosa playa de El Puntal desde su paseo marítimo de madera por el margen de la ría hacen de ella una playa espléndida, parte de la Reserva Natural Parcial de la Ría de Villaviciosa.